En la actualidad, las inteligencias artificiales (IA) han capturado la atención del público en general, y muchos de nosotros tenemos una comprensión básica de su alcance tecnológico. Sin embargo, la rápida evolución tecnológica nos enseña que no podemos dar nada por sentado. Es muy posible que futuras innovaciones nos planteen nuevos escenarios, desafiándonos a reconsiderar nuestras creencias y perspectivas.
Ha habido artículos que discuten cómo las IA podrían reemplazar las labores humanas, pero es esencial recordar lo que, al menos hasta el momento, estas no pueden sustituir en el ámbito del marketing.
Las IA están diseñadas para procesar y analizar datos, aprendiendo a partir de conjuntos masivos de información. Esto les permite reconocer patrones en el lenguaje, identificar tonos emocionales y otras características relacionadas con la subjetividad humana. Algunas incluso pueden detectar emociones mediante el análisis de palabras clave y estructuras lingüísticas.
No obstante, comprender la subjetividad real implica entender la perspectiva, el contexto y la complejidad de las emociones. Estas son habilidades que las IA aún no poseen en su totalidad. Aunque pueden simular respuestas emocionales, carecen de una auténtica experiencia. Esto nos lleva a la noción de empatía, una capacidad profundamente humana.
En el ámbito del marketing y la publicidad, comprender las necesidades, deseos y comportamientos de los consumidores es fundamental para crear campañas efectivas que conecten con las audiencias. Asimismo, la relación con los clientes requiere de empatía genuina.
Las IA pueden desempeñar un papel valioso al procesar y analizar datos de los consumidores para optimizar campañas publicitarias. No obstante, lo que hacemos con esos datos, cómo los interpretamos y aplicamos, requiere de una cualidad que es intrínseca a los seres humanos: la creatividad.
Cada vez más, necesitamos ideas innovadoras para abordar los desafíos de nuestros clientes y del mercado en general. La creatividad es esencial en todas las oportunidades en las que una marca busca conectarse con sus consumidores de manera única.
En última instancia, la empatía y la creatividad siguen siendo habilidades irremplazables en la creación de campañas publicitarias efectivas y en la comunicación de la identidad de una marca. Aunque las IA pueden brindar apoyo en el procesamiento de datos y la optimización, no pueden reemplazar a los profesionales del marketing, quienes aportan una visión estratégica, creativa y original para desarrollar estrategias disruptivas y novedosas.